Protección auditiva

En función del tipo de atenuación de ruido, los elementos de protección auditiva pueden clasificarse en tres grandes categorías:

• Atenuación constante: en este primer nivel se encuentran los protectores auditivos convencionales, que están desarrollados para reducir de forma constante la misma cantidad de ruido, proporcionando a los empleados una disminución regular de decibeles durante toda la jornada laboral.
• Atenuación variable o dependiente de nivel: en este caso la disminución del ruido varía de acuerdo a la cantidad de decibeles del ambiente de trabajo. Esto facilita la percepción de los ruidos del entorno, sin que el trabajador tenga que quitarse los protectores auditivos. Por eso, resultan ideales para realizar tareas con ruidos de impulso, es decir, con sonidos fuertes y breves, como por ejemplo, la explosión de un arco de soldadura o el impacto de una pistola de aire comprimido de clavos. Estos dispositivos de protección auditiva pueden ser electrónicos (activos) o no electrónicos (pasivos). Dado que los primeros cuentan con micrófonos ambientales para captar sonidos de nivel bajo, el usuario puede ajustar el volumen de los sonidos entrantes.
• Atenuación uniforme: finalmente, también existen protectores auditivos diseñados para ofrecer un sonido de calidad más natural, tanto frente a sonidos de baja como de alta frecuencia. En general, los protectores auditivos de atenuación uniforme reducen menos el ruido global y pueden ser una buena opción para los músicos o aquellos usuarios con actividades de menor exposición a ruidos.

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