La seguridad y salud ocupacional constituye una disciplina muy amplia que abarca múltiples temáticas específicas: la prevención de los accidentes de trabajo; el fomento del bienestar físico, mental y social de los trabajadores; el mantenimiento de un entorno laboral saludable; la protección de los trabajadores en su actividad; etcétera.
En materia de seguridad y salud ocupacional, las actividades deben tener por objeto evitar los accidentes y enfermedades laborales reconociendo la relación que existe entre la salud y la seguridad de los trabajadores, el lugar de trabajo y el entorno fuera del mismo. Evidentemente, las condiciones de trabajo influyen sobre el estado de salud de las personas de tal forma que, cuando dichas condiciones no son las adecuadas, se convierten en factores negativos permanentes, que pueden provocar enfermedades o accidentes.
El Convenio 187 de la OIT hace referencia a la "Cultura de la Prevención" para señalar el derecho a gozar de un medio ambiente de trabajo seguro y saludable, respetado en todos los niveles, tanto por el gobierno y los empleadores, como por los propios trabajadores. La cultura preventiva puede entenderse como el producto de los valores, actitudes, competencias y patrones de comportamiento, grupales e individuales, que determinan el compromiso, estilo y competencia de los programas de salud y seguridad, por parte de las organizaciones y la propia sociedad.
Ahora bien, aunque ofrecer un lugar de trabajo con las condiciones necesarias para garantizar la salud y seguridad de los trabajadores es absolutamente fundamental, también es muy importante que los mismos trabajadores cuiden de su propia salud, procurando prevenir posibles enfermedades o accidentes, mediante un trabajo a consciencia y responsable.
Con más de dos décadas de trayectoria y un amplio catálogo online, LUBE sigue renovando su compromiso a favor de la seguridad y salud ocupacional.
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